Un proyecto sanitario ‘made in Valladolid’ se lleva un gran premio: favorece los hábitos saludables entre los cuidadores

La VII Edición de los Premios OAT se ha celebrado con el fin de dar un reconocimiento público y poner en valor el esfuerzo realizado de todas aquellas entidades y personas, dentro del ámbito de la Sanidad que, durante el año 2023, han desarrollado proyectos o iniciativas con el fin de mejorar la adherencia en patologías crónicas, agudas y enfermedades raras.

En este certamen nacional, la Gerencia de Atención Primaria del Área de Salud Valladolid Oeste (ASVAO) ha resultado ganadora en la categoría 'Enfermería de Atención Primaria', como han informado fuentes sanitarias a EL ESPAÑOL de Castilla y León.

Un primer premio que ha sido concedido por el proyecto titulado: ‘Intervención comunitaria en cuidados informales: favoreciendo hábitos saludables’. Con él, los profesionales del ASVAO trabajan, de manera conjunta, tanto con la persona cuidadora como con el cuidador, para ayudar a propiciar actitudes positivas y ofrecer herramientas que ayudan a que la labor de la protección de la salud se realice siempre de la mejor manera posible.

Para ello se apuesta por la potenciación del autocuidado, la motivación y la búsqueda de alternativas saludables. La meta es que los tanto los pacientes como su entorno se puedan apoyar en las intervenciones comunitaria para cuidar y, por supuesto, también para aprender a cuidarse.

Con este fin se ha procedido a formar a los profesionales sanitarios de Atención Primaria de Valladolid Oeste, siempre con el apoyo de la Gerencia Regional de Salud, para que cuenten con la metodología necesaria para realizar intervenciones comunitarias dirigidas a los cuidadores informales del Área de Salud. El resultado ha sido la realización de seis sesiones de este tipo, con periodicidad semanal y una duración de dos horas cada una.

Para lograr que los asistentes pudieran acudir a estas formaciones, éstas se han desarrollado en los propios centros sanitarios y se ha limitado el aforo a grupos de entre 15 y 25 personas para fomentar la comunicación y la confianza entre todos los asistentes; ya que, una de las bases de trabajo de estas sesiones ha sido la participación y exposición de los sentimientos desde un ámbito común. Los cuidadores tienen que sentirse seguros para plantear sus dudar y poder expresarse sin miedo a ser juzgados.

Tras los talleres se ha realizado una encuesta de satisfacción y dos test (uno previo y otro posterior a las sesiones) para evaluar la eficacia de los mismos. Y los resultados han demostrado que, gracias a estas herramientas, los cuidadores han empezado a identificar mejor la sobrecarga a la que estaban sometidos, pudiendo así trabajar para reducirla.

Estas intervenciones han conseguido, asimismo, la creación de una red social de apoyo y fomento los hábitos saludables en el cuidado para ayudarles.

Por todo esto, en el momento actual, se continúa replicando esta iniciativa en varios centros de salud. Y hay planificación, por parte de varias Zonas Básicas de Salud (ZBS), para hacer más sesiones en los meses de octubre y noviembre del presente año.

Proyectos finalistas

Además, dos proyectos más del ASVAO han resultado finalistas en otras categorías de esta última edición de los Premios OAT.

Uno de ellos, ‘Paciente activo en Diabetes tipo II’, fue creado con el objetivo es potenciar el rol del paciente como principal responsable del cuidado de su salud; fomentando el autocuidado, el apoyo con otras personas en su misma situación y el asesoramiento y supervisión de los profesionales sanitarios de su ámbito más cercano.

Y el otro, denominado ‘Proyecto de mejora de la adherencia terapéutica de los pacientes institucionalizados en centros sociosanitarios’, se creó para mejorarla la adhesión a los tratamientos y la seguridad de la prestación farmacéutica en las residencias. Valladolid Oeste trabaja así en fortalecer la comunicación ágil entre todos los profesionales sanitarios implicados en el cuidado de los pacientes institucionalizados, para mejorar la coordinación entre todos y así garantizar que el plan terapéutico de cada persona esté actualizado permanentemente y se corresponda con los procesos clínicos activos.