En la alfombra roja de los Goya se pueden ver todo tipo de estilos. Clásicos, arriesgados, corte sirena, princesa, con guiños a la cultura o con diversos escotes. Lo cierto es que, como se suele decir, no siempre llueve a gusto de todos. Y, generalmente, hay algunos estilismos que crean más polémica de lo normal, esos suelen ser los más atrevidos.

En esta 38 edición el foco de todas las miradas se lo llevó la ministra de Igualdad, Ana Redondo, quien lucía un diseño de la vallisoletana Rosana Largo. Muchas personas que seguían la gala por 'streaming' no entendían este peculiar estilismo, pero fue la propia protagonista quien lo eligió.

"Ana Redondo ya conocía mi trabajo desde que fue concejala de Cultura en el Ayuntamiento de Valladolid porque inauguró una de mis exposiciones. Ha seguido muy de cerca mi trayectoria y en el último viaje que hice gané el premio Boticcelli en Florencia y llevé, precisamente, este diseño malva con corte renacentista", explica Largo en declaraciones a EL ESPAÑOL- Noticias de Castilla y León.

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, y la diseñadora Rosana Largo posando juntas en los Goya

Lo cierto es que para todos fue una sorpresa. Pero es que la diseñadora mezcla sus cuadros con la moda en las colecciones que realiza, de ahí que sean tan especiales y llamativas. "Es un cuadro andante", expresa. Y es que la ministra buscaba algo "distinto, original" y no cabe duda de que con ese "vestido-cuadro" concebía la "singularidad que ella quería". 

Un vestido que cuenta con muchos guiños y con más detalles de los que puede parecer. Por un lado, está el color malva, un "homenaje a su ciudad -Valladolid- y un guiño al ministerio de Igualdad". Además, también tiene una niña en la falda de corte neoclásico y en el sombrero se puede apreciar a una de las meninas de Velázquez, "ligando así la pintura a la moda".

Lleva distintos apliques y capas de tul de crinolina para lograr ese volumen y soporte del cuadro que va dibujado. También lleva tul en la manga porque la artista reconoce que no es "muy fan" de los tirantes en pleno invierno. La cola también porta diversos apliques y, en definitiva, asegura que "lo lució fantástica" y que "le quedaba como un guante".

Un diseño que, como era de esperar, ha generado un cierto revuelo en redes sociales. Ha habido comentarios de todo tipo sobre este estilismo y Largo afirma que muchos han aprovechado para hablar del arte, que es lo que estaban buscando. Otros, menos afortunados, han cargado contra el diseño: "Creo que no han entendido el vestido. Es una pintura policromada al óleo".

Un traje que ha estado expuesto en el Museo de los Cuentos y las Ciencias de Paredes de Nava, en Palencia, junto con el resto de colección de la cual, gran parte, se derivará a París.

Además, desvela que la ministra le confesó en la gala que a Pedro Almodóvar le había "encantado" el diseño.

Rosana Largo luciendo uno de sus 'vestido-cuadro'