Más leña al fuego del futuro centro de refugiados en Valladolid: “Se siembra miedo y odio”

Si el pasado lunes les volvíamos a transmitir la opinión de los vecinos de las Delicias y de la Asociación Nuevo Hospital, y su rechazo al centro de refugiados que podría aterrizar cerca del Hospital Río Hortega de Valladolid, hoy, Red Delicias se ha mostrado a favor del mismo.

En una entrevista de EL ESPAÑOL de Castilla y León con el concejal de Urbanismo y Vivienda, José Ignacio Zarandona, el edil nos explicaba que la decisión sobre la cesión o no definitiva al ministerio por parte del Ayuntamiento de Valladolid “se tomará antes de fin de año”.

En un comunicado de Red Delicias de este jueves, 9 de noviembre, la organización pucelana ha denunciado el señalamiento a las personas refugiadas y solicitantes de asilo como “peligrosas, delincuentes”, “sembrando miedo y odio”. Además, han indicado que reciben “continuamente mensajes de odio sobre estas personas” y han advertido que esto es un delito que está tipificado en el Código Penal, dentro del artículo 510 (bis).

En este escrito, la red ha expresado el compromiso con la promoción y también con la defensa de los derechos fundamentales, pilares de una sociedad “justa, inclusiva y respetuosa” y han recordado que estas personas en busca de asilo son, en su mayoría, individuos que buscan “seguridad y refugio”.

La Red se ha comprometido a abogar por una aplicación “justa y efectiva” del derecho de asilo en todo el mundo; a trabajar para garantizar que las personas refugiadas sean tratadas con dignidad y respeto y a colaborar con organizaciones y gobiernos para encontrar soluciones “duraderas” para las crisis humanitarias y los desplazamientos forzados. Respecto al derecho a migrar, abogó por políticas migratorias “justas y equitativas” que respeten los derechos humanos de todas las personas y por superar las “barreras y prejuicios” que a menudo se asocian con la migración, fomentando la inclusión y la diversidad.

Por ello, instaron a las autoridades y organismos competentes a cumplir su compromiso con los Derechos Humanos en general, y el Derecho de Asilo en particular; a colaborar con las autoridades y organizaciones pertinentes para combatir y prevenir los delitos de odio; a promover la educación y el entendimiento intercultural para reducir la intolerancia y el prejuicio y a ofrecer el apoyo a las víctimas de delitos de odio y abogar por la justicia en estos casos.