El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.

El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. Wikimedia Commons

Ávila

Doce años de prisión para un profesor de artes marciales por acostarse con una menor de 15 años en Ávila

El TSJCyL ha confirmado la condena de la Audiencia Provincial de Ávila por agresión sexual y ha revocado la de corrupción de menores, que incrementaba la pena seis años más 

1 julio, 2024 15:30

Un hombre, nacido en 1976, ha sido condenado a doce años de prisión por un delito de agresión sexual a una menor. El pasado mes de marzo, la Audiencia Provincial de Ávila le condenaba a 18 años de cárcel por mantener relaciones sexuales con una joven de 15 años y otro de corrupción de menores. 

Sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha estimado parcialmente el recurso de apelación interpuesto por el acusado contra la sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Ávila y le ha condenado a doce años de prisión. Es decir, se ha quedado con la pena interpuesta por la agresión sexual, eliminando la de corrupción de menores, que era de seis años.

El hombre vivía en Ávila y tenía numerosos antecedentes penales no computables a efectos de reincidencia. Regentaba en esta ciudad una academia de artes marciales donde también impartía clases de baile una mujer que era amiga de la menor víctima, nacida en 2005. 

Fue en 2020 cuando la menor, junto con la profesora de baile, coincidieron en el mismo bar que el acusado. Estuvieron tomando cervezas hasta que les besó en los labios a ambas y les propuso hacer un trío, sin que ninguna aceptara. 

Después de las navidades, cuando la menor tenía 15 años, quedó con el acusado e iniciaron una relación entre ellos llegando a mantener relaciones sexuales en el vehículo del acusado, así como en su academia y domicilio. Unas relaciones sexuales que se produjeron hasta el mes de marzo. En algunas ocasiones, este lo grababa, con la aceptación de la menor. Esta sirvió, posteriormente, como prueba aportada por la madre de la menor.

Pese a que las relaciones eran consentidas, en la parte de los hechos probados relatan que en ese momento, la joven era "una adolescente muy vulnerable en el contexto de una relación familiar disfuncional, buscando refugio, apoyo y ayuda en personas ajenas a la familia, que creyó haberlo encontrado en el acusado".

Por todo ello, ha sido acusado a doce años de prisión, con inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, como autor de un delito de corrupción de menores. Una sentencia contra la que cabe recurso de casación y que se podrá presentar durante los próximos cinco días a su notificación.