Este es el pueblo de Castilla y León con la primera iglesia porticada del románico español
En la localidad soriana de San Esteban de Gormaz puedes viajar al medievo y al S.XI al mismo tiempo
27 mayo, 2024 15:39Castilla y León cuenta con un patrimonio extenso, muy extenso, pero sobre todo rico. Monumentos de todo tipo llenan las calles de ciudades y pueblos por doquier en todos los rincones de la región. Lugares llenos de historias, leyendas y personajes, que hacen las delicias de cualquier guía turístico; lugares como el que protagoniza este espacio, donde el visitante puede viajar al medievo y al S. XI al mismo tiempo, sin moverse de la misma localidad.
Y si una palabra sobresale del resto al hablar de arte en nuestra región, esa es románico. Desde edificios como Nuestra Señora de la Anunciada en Urueña o San Pelayo de Perazancas en Palencia, o la primera construcción como fue San Isidoro en León, pasando por la fachada occidental de la Iglesia de Santiago el Mayor en Carrión de los Condes o San Martín en Frómista, el visitante se topa a su paso por Castilla y León con lugares dignos de admiración y parada obligatoria.
Uno de esos lugares es la localidad de San Esteban de Gormaz, que se enmarca en una de las comarcas sorianas con mayor concentración de edificios románicos conservados. ¿Y qué tiene de especial este municipio? Que en él se encuentra la iglesia de San Miguel ¿Y qué tiene de particular este edificio? Pues que se trata de la primera iglesia porticada del románico español.
La presencia de pórticos románicos adosados a muchas iglesias es, junto con lo que se conocía como "románico mudéjar", lo más singular del románico de nuestra tierra. En este caso en particular, los expertos creen que debió erigirse muy poco después de la toma de Gormaz en 1060 , ya que en 1081 se data la galería porticada que se adosa al costado sur de la nave del templo. Al menos así lo atestigua una fecha, la que aparece en uno de los muchos canecillos figurativos que sostienen su cornisa.
El templo contó en sus orígenes con nave única, y en el interior del templo existió una tribuna perimetral en altura que recorría su nave. Un lugar mágico para desconectar y viajar al pasado. Y también para ir descubriendo poco a poco todos los secretos que esconde, o escondía, como la desconocida hasta ahora tribuna perimetral.
Pero San Esteban de Gormaz no es solamente su iglesia porticada, ya que por sus calles corre la historia y se puede ver, y tocar, el paso del tiempo. No hay más que acercarse al puente medieval de piedra con sus 16 ojos o al castillo, una fortaleza que se alza sobre una elevación rocosa que domina la localidad del mismo nombre y el curso del río Duero.
Su otra iglesia, la de Nuestra Señora de Rivero, bien de Interés Cultural desde 1996, del siglo XII, sigue el modelo de su vecina San Miguel. Se trata de otra iglesia porticada que en su interior esconde un retablo de 1626 con la Virgen del Rivero en el centro y una bóveda con pinturas del S. XIII.
Además, si un visitante pasea por las calles de este municipio soriano, tendrá que estar muy atento a lo que le rodea porque si no, podría perderse alguna de las casas blasonadas que aún se conservan. Unas edificaciones construidas con adobe dispuesto a soga, tizón o espiga, madera o piedra, dependiendo de la riqueza del propietario.
Un paseo por la historia; por el arte; casi sin movernos de casa. Eso es lo que nos ofrece esta localidad soriana; lo que nos ofrece el turismo de interior y rural en Castilla y León.